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 Prólogo del libro
Este es un libro cuyo propósito es tratar, de una manera teórica y también práctica, saberes y técnicas elementales que nos ayuden a pensar con claridad y nos enseñen a vivir un poco mejor. Y este objetivo se basa a una vivencia aplicada de la Sabiduría de los primeros Maestros de la Grecia Antigua y sus enseñanzas sobre el vivir. La finalidad que este ensayo persigue es proporcionar información útil y provechosa sobre el origen del Conocimiento, testimonio en el que el mensaje de los Mitos griegos juega un papel fundamental.
Pero ante todo y en primer lugar hay que tener presente -y esto es algo que me gustaría dejar muy claro desde ahora- que NO HACE FALTA SABER DE FILOSOFÍA para leer y entender este texto. Más bien, está pensado para todo tipo de público y escrito de una forma sencilla y fácil de comprender; y además está pensado para motivar la participación del lector de forma activa y amena.
Y tal vez lo más importante: este es un trabajo que sirve para la vida diaria y aporta elementos prácticos para la experiencia cotidiana; en especial para aquellos asuntos que requieren una reflexión y que pueden contribuir a vivir una existencia más satisfactoria y una vida buena. En su conjunto, en este estudio -a través de diferentes, pero complementarias, temáticas- se exponen materias referentes a la Sabiduría Perenne y su aplicación en la vida práctica.
Sin embargo, estoy convencido de que también será muy eficiente para los amantes de la filosofía griega; e incluso muy interesante para los profesores y alumnos de filosofía y de otras materias que se ocupen de las humanidades. Para lo cual este ensayo dispone de pautas de pensamiento y acción muy beneficiosas.
Al leer este volumen nos encontraremos con el hecho de que está dirigido de una forma directa y amigable al lector o lectora. Lo que pretendo con ello es, estimado lector, crear un acercamiento personal entre nosotros y una colaboración por tu parte de las reflexiones que se plantean. Estas cuestiones -que te presento y de las que te hago partícipe al final de cada apartado o de cada capítulo- se vinculan con situaciones de tipo personal, social, religioso, político o cultural que nos toca vivir a todos. Esto hace que su contenido se enmarque dentro de un ámbito de plena actualidad.
El libro se inicia con una Primera Parte de fuente antropológica en la que se muestra, de forma breve y sencilla, el compendio de nuestros orígenes. He considerado significativo emprender la tarea con este argumento, porque me parece necesario saber que el comienzo de la humanidad se remonta al principio del Universo, a la formación de la Especie humana, al nacimiento de la Cultura y a la Era del Mito y del Rito.
La famosa pregunta filosófica ¿de dónde venimos? -muy fructuosa e imprescindible por cierto para adentrarnos en la aventura de la vida - no puede responderse, si no conocemos nuestros inicios: nuestra génesis como parte de un Universo único, como miembros de una misma Especie y de una Cultura para todos; así como el despliegue del Pensamiento Mítico y del Comportamiento Ritual.
La Segunda Parte se ocupa del Conocimiento Intuitivo y su función en la primera etapa del pensamiento filosófico. Y también de forma aplicada se expone la temática de la Conciencia: la manera de ser más conscientes de la realidad y de nosotros mismos.
Los Misterios egipcios y griegos y sus mitos más representativos son un paradigma de esta actividad conciencial. Y lo mismo ocurre con el apartado de Los Sueños y su interpretación - como se hacía en los templos de Apolo y de Asclepio- tan importantes para la vida de vigilia.
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