Comentario de la Librería
Versión actualizada del libro Del Huerto a la Despensa, del mismo autor.
Quizás la mejor introducción al libro sean los primeros compases con los que se abre la obra:
«Cuando disfrutas de la posibilidad de cultivar tus propios alimentos de forma sana y ecológica, ya sea en un huerto familiar, en un huerto urbano o en la terraza, a menudo te encuentras en la tesitura de no saber qué hacer con los excedentes de producción, especialmente cuando ya no sabes a quién regalar esos kilos y kilos de tomates, pimientos o calabacines que llenan las cestas cada vez que te acercas a cosechar.»
«(...) En la práctica, existen muchas formas de conservar los excedentes de las cosechas de temporada durante días, semanas o meses hasta que podamos hacer uso de ellos en la cocina. Por lo tanto, a la hora de plantearnos conservar ciertos alimentos, es importante conocer sus características y sus aptitudes de conservación lo mejor posible, ya que serán determinantes en la elección del método de conservación, así como en los pasos a seguir a fin de obtener buenos resultados.»
Dicho y hecho. En este nuevo libro el gran divulgador del cultivo ecológico nos introduce a los diferentes métodos de conservación para los productos de la huerta, las frutas o las setas. Además de una buena estructuración del libro, un redactado muy cuidado y alegres imágenes que sazonan todas las páginas, en este manual aprenderemos a conservar los productos de la huerta con todas las técnicas tradicionales posibles (más alguna de moderna): conservación en fresco (para muy pocos tipos de alimentos, y siempre en lugares resguardados del calor y de la luz); mediante el calor (escaldado, pasteurización, esterilización); por secado o deshidratación (en horno de cocina, mediante secador solar, por deshidratación osmótica o con un aparato eléctrico); con vinagre (encurtidos); congelados; mediante lactofermentados; con maceración en aceite; usando la sal (salmueras y salazones); y con azúcar (almíbares, compotas, mermeladas y compotas).
Y ahora ya lo tenemos todo listo para llevar a la despensa... -y, cuando se desee, a la mesa.
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