Introducción del libro
Los médicos de la India, donde nací en 1939, conocen los secretos de la piel perfecta y la belleza sin edad desde hace seis mil años. Esos secretos, que usted aprenderá a través de este libro, forman parte de uno de los sistemas de salud más antiguos del mundo, conocido como Ayurveda, que significa «conocimiento de la vida o longevidad».
Conocí informalmente esta antigua ciencia desde pequeña, pues en mi casa todo el mundo vivía conforme a las tradiciones ayurvédicas. Las comidas se preparaban al estilo del Ayurveda para mantener la salud física, la meditación y otras prácticas encaminadas a equilibrar la mente y el espíritu eran parte de nuestra rutina diaria. Era una vida familiar alegre y de amor y, como cualquier niño, yo no me daba cuenta de que era diferente de las demás. Sin embargo, desde temprana edad reconocí que mi madre y mi abuela parecían tener algo especial: eran mujeres notables cuya serenidad interior y luminosidad exterior jamás pasaban desapercibidas, sin importar dónde estuviéramos.
Debo confesar que mi conocimiento formal del Ayurveda comenzó de manera menos afortunada. Fue al comienzo de mi adolescencia, bajo la tutela de un famoso médico, vecino de mi familia. A los ochenta años necesitaba ayuda con su trabajo y yo fui la renuente elegida para servirle de asistente. Todas las tardes, después de la escuela, pasaba un par de horas en su casa, leyéndole o ayudándolo a preparar remedios y comprimidos. Como era de esperar, a los trece años no me agradaba mucho tener que pasar mi tiempo con un anciano o aprender sus extrañas fórmulas, pero era un jefe implacable e insistía en que anotara en unos cuadernos todo lo que decía. «Hoy no comprendes la importancia de lo que hacemos», me decía, «pero algún día aplicarás todas estas cosas en tu vida'.
Años después, cuando me embarqué en la carrera cuya culminación es este libro, recordé las palabras del doctor y reconocí el alcance de su sabiduría.
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