Comentario de la Librería
Más que un ensayo filosófico, este libro podría considerarse un 'divertimento'. Efectivamente, a diferencia de otros escritos el autor, de contenido más denso y que aceptan más de una lectura, el presente texto es un ameno recorrido por el mundo de la medición del tiempo: desde las culturas griega, egipcia o china, hasta llegar a nuestros días, con los relojes de medición atómica. Lo que hay detrás de todo ello, necesariamente, es un ensayo sobre el transformación del tiempo natural a la concepción de un tiempo mecánico...
Uno de los protagonistas de este libro es el reloj de arena, un aparato se supone muy antiguo pero que en realidad entró en escena a finales de la Edad Media (por cierto, en alemán al reloj de arena se le denomina 'ampollita de las horas'). A él le siguen y preceden otros medidores del tiempo, como las clepsidras (o 'robadores de agua') o sea, los relojes de agua! También encontramos a los pequeños palitos de incienso, cuyo original propósito era orientar sobre le paso del tiempo. Y con todos estos instrumentos iremos también de viaje por los paisajes y culturas que les dieron nacimiento: China, Grecia, el Renacimiento...
Pero cómo no podía ser de otro modo en un libro de Jünger, el texto también tiene su moraleja: en contraposición al los relojes que siguen al mundo natural para la medición del tiempo (relojes basados en el agua, el sol, el fuego, o la arena), hallamos también el reloj mecánico, de ruedas y manecillas, que según la leyenda vio la luz al doblar el año 1000, bajo los auspicios del papa Silvestre II (una especie de genio renacentista ubicado en plena Edad Media, que también introdujo el cero en la cultura europea y mejoró el ábaco). El reloj de ruedas fue desarrollándose lentamente en el interior de los monasterios, hasta alcanzar su madurez en el renacimiento, haciendo su entrada en las plazas públicas y hoy en día en todas partes. Jünger lo considera la primera máquina moderna, y este sentido lo considera como el invento más determinante lo de los últimos 1000 años. Enfrentando al tiempo natural con el tiempo mecánico, Jünger extrae sus conclusiones sobre la época moderna, su adecuación al automatismo, al 'robo' o desaparición del 'tiempo' del que antes disfrutaban los antepasados, o a la mecanización y sincronización de los procesos en el planeta.
Contra las leyes
«A partir de hoy pende de un cordón de crín En torno a mi cuello el reloj de las horas; A partir de hoy cesa el curso de las estrellas Cesan el Sol, el canto del gallo y la sombra, Y todo lo que alguna vez me anunció el tiempo, Todo eso es ahora mundo y sordo y ciego;- Silenciosa se mueve toda naturaleza Al tic-tac de la ley y dell reloj.» (F. Nietzsche)
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