Comentario de la Librería
El mismo título del libro, que hace mención al dios griego Dioniso, introduce la temática de este magistral ensayo. Dioniso, popularmente conocido como la divinidad del vino, era originalmente el un dios asociado a la embriaguez extática, enteogénica (posteriormente civilizada y rebajada a figura de patrón de la vid). Y rescatando los sabores de la Grecia clásica, con sus filósofos y mundo de pensamiento, el autor nos remonta a finales del siglo XIX para retomar la discusión del papel de la ebriedad -particularmente la enteogénica- en el seno de la cultura occidental, sobretodo durante el siglo XX.
Nietzche, William James, Huxley, Jünger, Benn, Benjamin, fueron escritores, psicólogos y filósofos que escribieron sobre el valor de la experiencia visionaria, el papel que podía jugar en nuestra sociedad tras el redescubrimiento de los psiquedélicos, los límites y oportunidades que su empleo ofrecía. Y a partir de sus escritos, Enrique Ocaña, el autor del presente libro, enlaza las obras de cada uno de los autores elaborando una trama de actitudes y propuestas: desde la vocación social e informativa de Huxley, el elitismo de Jünger, el humanismo de James o la dialéctica entre lo personal y lo social de Benn.
A destacar el capítulo dedicado a Gotfried Benn, un escritor alemán que figura entre los primeros psiconautas que ensayó con mescalina, ya en los años 30, produciendo un pequeño corpus literario de lo más interesante, original, novedoso y casi totalmente desconocido en la actualidad.
También es de señalar el capítulo dedicado a William James, un psicólogo Norteamericano, anglosajón de formación, que fue una de las primeras personas en escribir sobre la relación de la experiencia religiosa y el empleo de sustancias embriagantes, como el peyote, o el éter.
En definitiva, un libro de muy agradable lectura y que puede servir de trampolín a varios autores antes desconocidos pero de gran interés.
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